Porsche - Llegada y desmontaje

Llegada y desmontaje

Tras el desmontaje y el banco de enderezado el 911 T del 73 está listo para el baño de desesmaltado

El banco de enderezado no miente. Su juicio tiene toneladas de peso. La herramienta original de Porsche, un armazón de acero macizo diseñado en los años 60 para la medición de la carrocería del 911 (modelo F), continúa detectando hoy cada milímetro que se aparta de la forma original del vehículo. Y lo que los especialistas habían sospechado en su primera inspección se confirma ahora claramente: El 911 T fabricado en 1973 sufre las secuelas de un accidente en la parte delantera izquierda, posiblemente el recuerdo de un lejano día de competición.

El lema “Revivir la pasión” saca algunas cosas a la luz. Esta campaña, organizada conjuntamente por el Porsche Club of America (PCA), la asistencia a los clubes Porsche y Porsche Classic, ya está en plena acción. En el taller de Porsche Classic cerca de Stuttgart ya han comenzado los trabajos de restauración del 911 T que se sorteará entre los miembros del PCA y que se presentará al público estadounidense en el Porsche Parade de agosto de 2011. Los organizadores encontraron el vehículo por Internet en Los Ángeles. Fuera de uso, algo olvidado, pero en buen estado en lo fundamental.

Porsche Classic organizó entonces el viaje del 911 a su antiguo hogar con sus socios transportistas habituales. Primero en camión hacia St. Charles, Illinois, donde el clásico se presentó a los miembros del PCA en el Porsche Parade de ese año, y luego a Nueva York. Allí se embarcó hacia Rotterdam, en el correspondiente contenedor individual de 20 pies. Un camión cerrado llevó por fin la apreciada piezade coleccionista hasta Stuttgart. Aquí es donde será devuelto a su estado original, con profesionalidad y sin concesiones. Para ser exactos, ahora va a ser mejor que nunca antes.

Pero hasta llegar a ese punto hay que recorrer el largo y difícil camino que exigen los experimentados especialistas con su meticulosidad, sus procedimientos y las herramientas originales de las que sólo dispone Porsche. Para llegar a la carrocería en bruto primero emplearon sierras flexibles y de aire comprimido para retirar todas las piezas ajenas al 911 T original con sus estilizadas formas. Se trataba de las aletas delanteras, las piezas laterales traseras, el capó del motor con su spoiler casero, el exagerado spoiler frontal y también el capó del maletero, proveniente de un modelo 911 posterior. Las llantas norteamericanas con sus neumáticos sobredimensionados también fueron víctimas de los especialistas de Porsche. Con la retirada de los ejes, el chasis, el motor y la caja de cambios, el mazo de cables y todo lo que aún estaba en su sitio del interior, se culminó la primera fase del desmontaje. La visión directa de la carrocería en bruto produjo las primeras risas: en Los Ángeles unos pájaros habían establecido aquí su hogar sintiéndose protegidos por el 911.

La doblez de la parte delantera, sólo visible para los expertos, era una señal clara de un accidente, y arrojó estas medidas en el banco de enderezado: delante a la izquierda diez milímetros demasiado alto y deformación de nueve milímetros (detrás) y doce milímetros (delante) en el brazo triangular. Para conseguir la máxima precisión al devolver la carrocería a su forma original, el mecánico no lo confió todo al banco de enderezado. Por una parte se aplicó un molde de marco original al parabrisas, ya que la carrocería no permite ninguna holgura. Por otra la carrocería se sometió a tensión hidráulica por medio de una cadena. El resto requería trabajo a medida con la sensibilidad de un trabajador experimentado. Algunos mecánicos del taller Classic ya trabajaron en la producción del 911 en los años 70 y conocen este tipo de vehículo a la perfección.

Sólo entonces fue posible cortar y extraer la deteriorada chapa del suelo. Al fin y al cabo, nos dice Jochen Bader, director del taller Classic, una carrocería solo puede adoptar su forma cuando aún es estable. La última preparación para el baño de desesmaltado consistió en abrir todos los espacios huecos de la carrocería. Este paso de trabajo contribuirá en gran medida a la longevidad de esta joya, porque sólo así llega la solución de desesmaltado hasta el último rincón. Y solo así el baño neutralizador con el que se aclara la solución puede limpiar cada milímetro.

Ahora los preparativos han finalizado. La carrocería en bruto del 911 T ha perdido todo el lastre y se dispone al baño. Los especialistas siguen trabajando. Lo siguiente es ocuparse de la caja de cambios.

Porsche Llegada y desmontaje - Anuncio del proyecto

Anuncio del proyecto

Porsche Llegada y desmontaje - Llegada y desmontaje

Llegada y desmontaje

Porsche Llegada y desmontaje - Caja de cambios

Caja de cambios

Porsche Llegada y desmontaje - Carrocería y desesmaltado

Carrocería y desesmaltado

Porsche Llegada y desmontaje - Reconstrucción de la carrocería

Reconstrucción de la carrocería

Porsche Llegada y desmontaje - Motor

Motor

Porsche Llegada y desmontaje - KTL y pintura

KTL y pintura

Porsche Llegada y desmontaje - El interior

El interior

Porsche Llegada y desmontaje - Montaje final

Montaje final

Porsche Llegada y desmontaje - Entrega al ganador

Entrega al ganador

Porsche Llegada y desmontaje - El 911 T en el Museo Porsche

El 911 T en el Museo Porsche